Los bebés reborn nacen a partir de esculturas creadas por artistas que las realizan, normalmente, inspirándose en bebés reales.
Este es un ejemplo de la escultura que después se convertirá en el kit
Este es un ejemplo de la escultura que después se convertirá en el kit
Y aquí ya se ve el kit pintado y convertido en bebé reborn
Estas esculturas de bebés suelen hacerse en materiales maleables que, una vez terminada la obra, se hornean para darle solidez.
Pueden hacerse distintas o parecidas versiones de un mismo rostro de bebe, a modo de prueba. Aunque si, finalmente, hay más de una aceptable, se comercializan como gemelos o mellizos, trillizos e incluso cuatrillizos.
Llegado a este punto, la escultora envía a producción su obra y después de diversas pruebas y algunos procesos un tanto largos de explicar, la escultura está lista para convertirla en piezas de vinilo que después se pueden pintar.
Entonces comienza la producción, a veces de unidades limitadas (suelen ser un mínimo de 100 y un máximo de 500 y se entregan con certificados de autenticidad) o ilimitadas, cuando se fabrican bajo una marca o empresa especializada en el sector.
Los de tirada limitada siempre son kits más caros, como es lógico; y los bebés que resultan de ellos suelen venderse a precios superiores porque, como ya se sabe, cada bebé es irrepetible y si hay pocas unidades en el mundo, razón de más para que no haya dos iguales.
En España, de momento, solo hay una escultora que haga modelos para bebé reborn, pero que tiene un prestigio internacional porque sus creaciones son preciosas. Su nombre es Maribel Vallés, aunque en Europa y Norteamérica se le suele conocer como Maribel Villanova. Estos son algunos de sus modelos
María
Nicolás
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